Helloween: The Oath of the Survivors (1994-1996)
Helloween: Take me to motherland (1994-1996)
Por Sergio Pescador
I. Destino.
Polemon o Naturo, vienen a la mente al pensar en series de anime con temporadas infinitas, sin lógica ni razón de ser con nulo desarrollo emocional de los personajes....como la mayoría de las discografías de bandas genéricas de, en este caso, el denominado power o speed metal.
Febrero, 20, 1993.
Se transmite en Japón, el episodio 45, Day Of Destiny, de la primera temporada de 5 de Sailor Moon.
Spoiler alert.
Todas las Sailor Senshi, Scouts para los mortales, mueren peleando por lo que creen.
Un panorama desolador tendrá que enfrentar Usagi Tsukino, identidad secreta de Sailor Moon - no lo reveles - para la segunda temporada tendrá que rensamblar su heroico quinteto para cumplir su misión.
Il. Reencarnación.
Otro quinteto, este proveniente de Hamburgo, Alemania, coincidiendo en 1993, se encontraba en una encrucijada similar:
Sin cantante, ni compositor principal, tampoco baterista y añade falta de disquera.
En manos menos capaces esto hubiera significado el final del grupo
o el fácil camino a la autoparodia y mediocridad.
Únete a nosotros, mientras acompañamos a Helloween en su búsqueda para recobrar su Reino de Plata:
Igual que Usagi, Michael Weikath,guitarrista y líder de Helloween, empieza a reunir los fragmentos. Roland Grapow, guitarrista y Markus Grosskopf , bajista continúan a su lado.. Fichan a Uli Kusch, ex Holy Moses, Axe LaChapelle y Gamma Ray, como baterista. No lo subestimes, su estatura en el escenario y la composición musical y letrista es similar a Marquis Marky (Coroner), Gene Hoglan en Dark Angel o Neil Peart en Rush.
Alguien que solo interprete las canciones, tipo Vince Neil de Motley Crue o Joey Belladonna en Anthrax, una copia del inimitable Kiske, que en esta era están replicándose, cosechando todo el esfuerzo de Helloween durante la década previa, no es la opción inteligente: Aparece Andi Deris, ex Pink Cream 69. Carismático, talentoso, energético, bien parecido y por encima de todo, con un timbre vocal imperdible y un estilo melódico que devolverá la magia a Helloween, transformando la ahora casi putrefacta calabaza en una carroza digna de Cinderella.
III. 1994. Master of the Rings.
En el aspecto disquera, ellos firman localmente con varias distintas, lo cual es un golpe de mercadotecnia genial, es decisivo para permitir distribución y disponibilidad a escala mundial. Después de una breve introducción clásica, "Irritation", no es el lago de los cisnes, es un ganso etílico, "Sole Survivor", te golpea el rostro, doble bombo guía esta imparable canción abridora, los riffs con zarpas de halcón, el águila vuela libre huyendo siguiendo a (Raven), la batería tiene un exo esqueleto de acero, el bajo se agazapa en un paso rítmico resistente al oxido, endureciendo los tintes más hard rock del combo previo del vocalista, el nombre exclama, persiste si tu voluntad lo permite;
"Why?", un midtempo que pulveriza glaciares, no cuestiones la existencia de Dios, si dudas (Destruction) The Antichrist contiene un análisis del texto homónimo de Nietzsche, cuya letra se atreve a entrar en terrenos cristianos de Kings X o Stryper, cuestiona la conservación de la fe en tiempos obscuros, recurriendo a Dios como fortaleza, el creador habla en diversas maneras, te consuela con sonidos gratos como este corte, mientras la mayoría continua pecando, revisa nuestro estudio de sectas engañosas con (Red Velvet) y analiza denuncias a respecto.
Amén.
"Mister Ego (Take me down)", edita riffs ahumados, un dulce olor a cedro rojo te rodea, los solos extendidos impregnan el sitio de un sabor a Jimi Hendrix, la letra desenmascara al verdadero mal: la envidia (Red Velvet), el rencor, la imposibilidad de reconocer el éxito ajeno (Brave Girls), mantenlos lejos de tus pasos, como prácticamente todo el Lp, tiene un memorable coro, un corte lento, me atrevo a llamarlo bluesero, en deuda con (Led Zeppelin), de nuevo preguntando a los avariciosos y egoístas por qué terminaron solos y sin amigos a pesar de sus logros económicos.
"Perfect Gentleman", que debería tener un video animado con Pepe LePew de Looney Tunes como protagonista, con su inconfundible riff de teclado, es una genuinamente divertida historia de un galanazo con resultados fallidos en su conquista de féminas, como en el gracioso video de (Girls Generation) Lionheart, en la actualidad seria cancelado (Wonder Girls) como todo lo que no le parece a una insatisfecha multitud anónima y exigente, la melodía de silbido confirma que el humor y el metal tienen cabida en tu vida. "The game is on", tiene un ritmo de Super Nintendo 64, una oda a los tiempos cuando reunirse en las "Arcade", farmacias o sitios donde hubieran máquinas tragamonedas de videojuegos, se volvían tu segundo hogar, es el himno para los obsesos de los videojuegos, gamers se les dice ahora, quienes están en mucho riesgo si son Streamers (Busters X) detallan todo el peligro al que están expuestos, el coro es vencer al jefe final del nivel con una sola moneda.
"Secret Alibi", las melodias en serpentina recuerdan a (Guns'n'Roses) Locomotive, la letra es una propuesta de aventura extra marital, redactada por (Hanoi Rocks) Michael Monroe, el ritmo evoca a Pretty Maids, que sugieren lealtad para un romance duradero. "Take me home", inicial con una demencial instrumental, (Van Halen) Sucker in a 3 piece saludan con orgullo, la velocidad alcanza la urgencia de (Rage) Take me to the water, nuestro hogar es donde el metal reside. "In the middle of a heartbeat", igual que (Heavens Gate) The best days of my life, no hay cobardía expuesta al desnudar tus sentimientos, con solo voz y guitarra acústica se asciende a verdes campos. "Still we go", es una promesa de que este Lp no es buena suerte, sino consecuencia de ardua labor. la intro de caja de música, el gruñido del simio, pudo venir en su denostado lp de 1990, la banda confirma que su arsenal de trucos no se agotan, las melodías actualizan la dureza de (Accept) Metal Heart, quienes por estas fechas retornan con éxito aunque las modas pasen, la calidad del grupo permanece.
"Where the rain grows".
-"¿Qué hiciste con tu vida?" -
le preguntara Dios a Andi cuando fallezca en un día muy muy lejano.
- "Le traje gozo a la gente" -
responderá sonriendo, cantando esta impresionante composición.
Un medio tiempo que destroza a todos los grupos de power metal imitación, la batería se ensancha sobre una cubierta de fibra de vidrio reforzada, las melodías de tapping en la guitarra ensamblan un pre coro digno de (Dokken) Just got lucky o (Angra) Mystery Machine, las voces son de conexión transcontinental, la letra habla acerca de despreocuparte de la crítica cínica y malsana, apunta arriba y deja que la imaginación dote de color a tu vida, ese onírico sitio donde nace la lluvia es sembrado por lágrimas de gozo posteriores al esfuerzo. El video promocional es cumplidor.
Muchas personas incrementan su frustración y stress oyendo música agresiva y deprimente , no me refiero exclusivamente a metal, escuchar reggaeton a todo volumen en el transporte público es reflejo de un individuo que odia su trabajo e intenta calmar, o callar con ruido, su vacío existencial. Helloween es lo contrario, la forma en que está estructurada esta canción inmediatamente disminuye tus niveles de triglicéridos.
Evita Herbalife, haz ejercicio, come sano y escucha Helloween.
IV. 1996. The time Of the Oath.
Helloween, como un organismo, se adapta a sus nuevas extremidades.
La evolución continúa.
"We burn", literalmente hace eso, calcinando el suelo alrededor tuyo, el sonido de silbato de tren, es (Aerosmith) Train kept-a-rollin' conduciendo hacia (ACDC) Highway to Hell, las composiciones no son retazos a medio comer del disco anterior, se nota una alineación rebosando creatividad y entusiasmo, las guitarras son literales lanzallamas, (Overkill) Feeding Frenzy se asoma con sigilo, sonido moderno no forzado. "Steel Tormentor", una carrera a la victoria. Heredero del Freewheel Burning de Judas Priest, compite con (Saxon) Wheels of Steel o (Primal Fear) Formula One, porta tu casco, respeta el límite de velocidad, su tempo voraz atropella lo que resta de miserable y caduco grunge.
. "Wake up the mountain", baja el tempo, pero no la calidad, Bruce Dickinson (Skunkworks) fue su grupo abridor, una lástima que su lp experimental, muy recomendable, fuera una decepción comercial, los riffs se asemejan a la formación rocosa titular, el groove incontenible se asemeja a (Cathedral) Midnight Mountain con un aguacero de (Pantera) Floods, sigue tus metas, la parte coral de apoyo grupal te conforta y recuerda que no estás solo, siempre hay una nueva cúspide que escalar. "Power" es lo que Michael Weikath escribe en su pasaporte debajo de ocupación, la nueva década, por fin, retira los subgéneros innecesarios como power, speed, happy o lo que desees - metal, esto es puro y sin diluir, metal, la rápida intro son los cimientos para un coro majestuoso, recuerda que el poder y la luminosidad yacen dentro de ti (Lightsum) utilízalos para el bien, no dejes que la ansiedad lo devore
"Forever and One (Neverland)" no habla del rancho a donde Michael Jackson me invitó, cuando niño, a una pijamada pero no pude ir, pues mi madre no lo autorizo, es una balada sublime, el piano lidera las melodías melancólicas, el pañuelo se empapa de lágrimas, imposible distinguir si son añejas de ella o tuyas por su partida, aquellos que nos brindaron su amistad, amor y palabras permanecen con nosotros para siempre (The Scorpions) Lady Starlight o, (HammerFall) Glory to the Brave, levantan sus escudos con solidaridad, siempre recordados. "Before the War", la intro de batalla inminente avisa la llegada de (Running Wild) Victory y (Blind Guardian) Another Holy War, un rápido tema con incertidumbre de si volverás vivo del conflicto, (Chroming Rose) Right to die; "A million to one", no es cover del clásico de Kiss, pero pudo venir en Revenge, tiene una sección instrumental media que impacta donde los riffs se re ensamblan como el llamado de the Avengers, la letra advierte sobre la ambición desmedida.
"Anything my mama don't like" es el hermano distraído de Perfect Gentleman - divertido más no estupido, (Metallica) lanza Mama said este año, un experimento country, a regañadientes, aceptas la molestia de aquel al que no le gusta Metallica, el caleidoscopio de ritmos que maneja Helloween con pericia confirma su jerarquía, la letra se mofa de (The Ramones) Mama's boy, donde la progenitora, casi selecciona las trusas de su vástago, "If I knew", balada agridulce, con teclados de Uriah Heep, las letras imploran por reclamos y remordimientos, visualiza una máquina del tiempo disponible, ¿Cometerías los mismos errores?; "Kings will be Kings", riffs de piedra caliza, Iron Maiden, Dio y Judas Priest se encuentran en su punto más bajo comercial, sin embargo jamás renuncian a su sonido ni intenciones, se refugian en disqueras independientes y editan obras que el tiempo juzgara con justicia, la corona regresara a sus poseedores verdaderos en el futuro, la sinceridad de los arriba mencionados es incuestionable,
"The time Of the Oath", más pesado que Candlemass en la época Messiah Marcolin, su riff lento y repetitivo es el hermano joven y popular de Zero the Hero de Black Sabbath, desde el arte de la portada la unión con The Keepers es incuestionable, esta es la parte 3 no reconocida, la intro de tintes industriales recuerda a (Kreator) Renewal, la narrativa obscura demanda un cameo de King Diamond un cierre majestuoso para un disco indispensable.
"Mission Motherland". Aparece en nuestra investigación de metal y alienígenas: Tal vez los humanos solo somos un experimento de seres superiores, quienes observan con pesar nuestra falta de solidaridad e instinto consumidor deseoso de extinguir todo lo hermoso. Esta épica canción narra un viaje al espacio exterior en busca de paz y tranquilidad. Musicalmente equipara a (King Crimson) Islands, (Dream Theater) Change of Seasons, (Fates Warning) The eleventh hour o Cygnus X-1 de Rush con guion de Ray Bradbury. Letristicamente es el opuesto de Jack Luminous de Voivod,
Queda un dilema:
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